sábado, 1 de septiembre de 2012

El toro y el escribidor

Hace poco leí un argumento a favor de las corridas de toros. Era de MVLL. Como no soy nadie para criticar a tamaño intelectual, solo diré que es curiosa la forma en que desea justificar lo que es solo una muestra más de nuestra esencia primitiva, con argumentos de sensibilidad artística y reflexión existencial.

¿Quién soy yo para impedir a otros que disfruten de sus placeres mundanos o espirituales? Pero justificar por el ego y el intelecto lo que no es sino otra forma de satisfacer nuestros instintos es demasiada arrogancia.

Hay quienes, cuando se trata de sus propias miserias o placeres, hablan de “el alma se constriñe en espasmos dolorosos que fluyen de mi cuerpo en un eco del aire” para describir lo que es un literal y simple “pedo”.

Corridas o no corridas son lo que son. Mejor encogerse de hombros y decir: “Es mi vicio y mi placer”. Punto.

PD: Aquí el articulillo de marras

http://www.larepublica.pe/columnistas/piedra-de-toque/la-